El ángulo de incidencia es igual al ángulo de reflexión - esta simple regla general es probablemente conocida por muchos en sus días de escuela. Los reflejos de la bombilla le permiten influir en el ángulo de difusión de las lámparas para adaptarlas a tus necesidades. En el caso de las llamadas lámparas reflectoras, se consigue un determinado ángulo de emisión de luz. Cuanto menor sea este ángulo, mayor será la concentración y el valor de candela de la intensidad luminosa, definida como flujo luminoso por ángulo sólido. Sin embargo, como comprador de lámparas, no basta con conocer el ángulo de radiación: la distancia entre la lámpara y el objeto iluminado tiene también una importancia fundamental, ya que el tamaño de la superficie iluminada aumenta con la distancia. La mayoría de las lámparas reflectoras halógenas tienen un ángulo de emisión de 35 grados. En el caso de los LED, que emiten luz directa de todos modos, se suele utilizar una lente para ajustar el ángulo del haz entre 25 y 120 grados.
La distribución de la luminosidad en el ángulo del haz
Otro término para el ángulo del rayo es el ángulo de medio valor. Esto se debe a que al menos la mitad de la intensidad luminosa máxima (puntual) debe emitirse dentro del ángulo del haz. Cualquiera que conozca los valores de lúmenes y ángulos de haz de su nueva lámpara no puede deducir necesariamente la distribución exacta de la luminosidad. Incluso fuera de la zona de la sala, en el ángulo del haz de luz, todavía puede haber brillo. Para saberlo con seguridad, es necesario examinar el diagrama de distribución de luz de la lámpara. Esto representa una sección transversal bidimensional de la curva de distribución de luz tridimensional. El ángulo de distribución tiene una gran importancia práctica, por ejemplo, para las lámparas reflectoras. Para una primera comparación de la luminosidad y su distribución entre dos lámparas, los valores del lumen y del ángulo del haz suelen ser suficientes, sobre todo porque la forma de la lámpara suele ser una indicación decisiva.
¿Qué ángulo del haz y para qué?
En la mayoría de las zonas de estar, se recomienda un gran ángulo de hasta 120 grados para la iluminación básica. Para la iluminación específica de determinadas zonas de transición, un ángulo de 90 grados resulta ser una opción eficaz. La iluminación frontal y la luz directa, por ejemplo, de una lámpara de lectura, suelen tener un ángulo de haz mucho menor. Dos ejemplos (la distancia entre la lámpara y el objeto es de 2 metros):
- Ángulo del haz de 15 grados: área de 60 x 60 cm
- Ángulo del haz de 60 grados: > área de 2 x 2 m