Justo cuando estás durmiendo tranquilamente y plácidamente, de repente te despiertas con el sonido estridente de una alarma. El fenómeno de no poder levantarse de la cama por la mañana está muy extendido. El sonido del despertador se percibe como una perturbación diaria de la paz y la tranquilidad, y al primer sonido se activa la función de repetición hasta que se vuelve a poner en marcha. La mañana es diferente con un despertador luminoso.
Un remedio natural que proporciona alivio
Los remedios caseros como el café fuerte por la mañana o una ducha fría son bien conocidos, pero es más fácil decirlo que hacerlo. Porque, en primer lugar, hay que salir de la cama. Las llamadas de atención diurnas son un método mucho menos conocido para combatir las reticencias matutinas y los retrasos. Gracias a la irradiación dirigida de la luz, esta idea se considera un remedio prometedor. Los despertadores luminosos se inspiran en el amanecer natural y son, por tanto, una forma intuitiva de despertarse. Ya hace cientos de años, la gente ajustaba su ritmo diurno y nocturno en función del grado de luminosidad.
¿Cómo funciona un despertador luminoso?
Con el despertador luminoso, se programa una hora de alarma a la que la luz empieza a brillar lentamente. La cantidad de luz aumenta cada minuto y los colores de la luz también cambian con el tiempo. En un momento dado, la persona que se despierta comienza a parpadear. La luz actúa como un estímulo para nuestro cuerpo. Estimula la producción de la hormona de la felicidad, la serotonina, que nos lleva naturalmente a un estado de vigilia. Pasamos del ritmo nocturno al diurno.
¿Por qué no funciona esto con los interruptores del sueño en forma de despertadores molestos? La necesidad repentina de levantarse crea un desequilibrio entre la hormona de la felicidad, la serotonina, y la hormona que estimula el sueño, la melatonina. En muchos casos, esta última se impone porque la fase de sueño profundo termina de forma demasiado brusca.
La intensidad de la luz de la mayoría de los dispositivos puede ajustarse individualmente, y los despertadores luminosos están disponibles en diferentes diseños. Para utilizar los despertadores, no deben colocarse a más de 70 centímetros de la almohada para conseguir el efecto deseado.
¿Utilizar los despertadores para conciliar el sueño?
Por cierto: los despertadores también pueden utilizarse para conciliar el sueño. Suena sospechoso, pero ya se utiliza en la práctica. Algunos despertadores simulan la puesta de sol y, poco a poco, hacen que la persona que está descansando se canse, de modo que acaba quedándose dormida dulcemente.
